Cineasta de Bolivia Martín Boulocq, elogiado por película El visitante. El cineasta de Bolivia Martín Boulocq regresa como director con El visitante, una reflexión mordaz sobre los lazos familiares fracturados y la influencia de la religión.

Bolivia cine el visitante

El camino de la redención no es tarea fácil en el drama de gran riqueza visual y temática del cineasta de Bolivia, que avanza a un ritmo marcadamente mesurado.

Ambientada en la ciudad de Cochabamba, la película sigue al exconvicto Humberto (Enrique Aráoz), quien se gana la vida como cantante en velorios. Humberto hace el viaje a casa para reconectarse con su hija separada, Aleida (Svet Mena). Pero esto resulta más difícil ya que sus suegros desaprobadores, Carlos (César Troncoso) y Elizabeth (Mirella Pascual), quienes han estado criando a Aleida, son protectores.

Carlos es un pastor argentino adinerado con profundos lazos con la comunidad evangélica. Como tal, está criando a Aleida en la misma comunidad, para consternación de Humberto. Carlos finalmente le permite ver a Aleida de vez en cuando. Humberto comienza a asistir a la iglesia para permanecer del lado bueno de Carlos mientras puede adquirir suficiente dinero para liberar a su hija del control dominante de la pareja.

Plano general

El Visitante comienza con un plano general de Humberto caminando por la calle cargando una maleta, lo que indica que se está alejando de un pasado que está tratando de olvidar. Sin embargo, un amigo le dice que la sociedad siempre lo juzgará por ser un exconvicto. No obstante, Humberto hace lo que puede para demostrarle a la corte que es capaz de mantener a su hija.

Además de ser un drama familiar, la película también funciona como un comentario de clase. Carlos es de clase alta, mientras que Humberto se crió y sigue viviendo como de clase baja. Pero, ¿debe decidirse la custodia de los hijos únicamente por las oportunidades que puede brindar un cuidador?

Boulocq y el coguionista Rodrigo Hasbun no tienen una respuesta clara, entrelazando su guión con muchos matices diferentes de perfidia implementados por las manos de Humberto y Carlos, lo que funciona a favor de la película.

Sinopsis

Carlos es un hombre intimidante con la religión de su lado. En una escena en particular, Carlos utiliza su poder como pastor para humillar a Humberto frente a toda la congregación; está brillantemente ejecutado. Nunca estalla una discusión entre los dos. En cambio, Humberto mira fijamente a Carlos, quien continúa hablando sobre buscar el perdón de Dios de una manera pomposa. Este momento es realmente desconcertante.

Humberto es reservado y quebrantado, pero optimista de que puede ser el padre que Aleida se merece. Su desdén por Carlos y Elizabeth solo se muestra a través de miradas maliciosas. Aún así, El Visitante está plagado de una tensión palpable entre él y los suegros que cautiva.

El recién llegado Enrique Aráoz aporta mucha rabia y desesperación visiblemente reprimidas al personaje, lo que ayuda a mostrar a Humberto de una manera comprensiva, aunque poco halagadora. Eso no quiere decir que Carlos y Elizabeth sean mejores cuidadores. La escena final transmite cómo las familias imponen la religión a sus seres queridos y, lamentablemente, a veces, no hay nada que uno pueda hacer más que estar de acuerdo en este momento.

Fotografía

El director de fotografía German Nocella y la editora Irene Cajias construyen una instantánea a fuego lento de un hombre común y su lugar en un mundo dominado por la religión y el dinero. Los movimientos de cámara y los cortes son elegantes y se emplean con la intención de mostrar cómo la vida de Humberto está ligeramente desequilibrada.

No tiene tiempo para recuperar el aliento porque está tratando de ganar la custodia de Aleida y no siempre toma las mejores decisiones. La toma visualmente más convincente es una de Humberto y su hija sentados uno al lado del otro mientras contemplan la impresionante vista de la ciudad. Ojalá las cosas pudieran ser siempre tan hermosas e inmóviles.

Pero Boulocq lo sabe mejor y se abstiene de engendrar conflictos innecesarios y, al mismo tiempo, no resuelve los lazos rotos con una conversación convenientemente esclarecedora entre enemigos. Pero debido a esto, el final,

La película es una historia pensativa y lúgubre que te confronta a ti mismo y al pasado, así como a las expectativas de la sociedad, la religión y la familia.

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here