Bolivia recibe cuatro nuevos embajadores. Los nuevos embajadores de Egipto, Francia, Perú y Suecia en Bolivia presentaron sus cartas credenciales al presidente del país, Luis Arce.
Bolivia nuevos embajadores
Los nuevos embajadores acreditados son Nicolas Linus Ragnar Weeks, de Suecia; Tarek Mohyeldin Abdelmagid Elwassimy, de Egipto; Hélène Roos, de Francia; y Carina Ruth Palacios, de Perú.
Arce, acompañado por el ministro boliviano de Exteriores, Rogelio Mayta, saludó uno a uno a los diplomáticos con quienes conversó por separado por algunos minutos.
El gobernante también dedicó a los embajadores mensajes individuales en Twitter para darles la bienvenida al país y expresarles sus deseos de profundizar las relaciones bilaterales con sus países.
«Desarrollaremos un trabajo coordinado para dar continuidad a las relaciones de amistad entre nuestros países», dijo Arce a la nueva embajadora de Francia, mientras que destacó que la presencia de Palacios «permitirá impulsar los acuerdos» que se tienen con Perú.
También señaló que con el embajador de Egipto se trabajará «para profundizar las relaciones comerciales y de amistad» entre ambos países y se seguirá «construyendo relaciones de fraternidad» con Suecia a través de su nuevo representante diplomático en La Paz.
Weeks llega a Bolivia procedente de Tailandia, donde se desempeñó desde 2017 como ministro consejero en la embajada sueca en Bangkok.
Hasta antes de su traslado a La Paz, Roos fue consejera de Cooperación y Acción cultural y directora del Instituto Francés de Rumanía en Bucarest.
El nuevo embajador egipcio en Bolivia estuvo antes en las representaciones diplomáticas de su país en Nueva Zelanda, India, Marruecos y España, entre otros.
Embajadora afín
La peruana Carina Ruth Palacios es la más destacada, no solamente por ser la representante del país vecino, sino por la afinidad ideológica con el gobierno de La Paz.
Es que Palacios es una de las fundadoras del partido Perú Libre, el mismo que llevó a la presidencia a Pedro Castillo. Su designación se encuadra en el alineamiento en el poder de las ultras izquierdas en ambos países.
