Argentina, implican a hijo de Cristina Kirchner en juicio por corrupción. Fiscalía en Argentina involucra al hijo de la expresidenta y actual vice Cristina Fernández, Máximo Kirchner, en juicio por corrupción.
Argentina Kirchner juicio corrupción
Fiscalía en Argentina implicó este viernes al hijo de la expresidenta y actual vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, en el juicio en el que se le acusa de presuntas irregularidades en la adjudicación de obras públicas cuando ella era presidenta
Al tercer día de alegatos, el fiscal Diego Luciani mostró nuevos mensajes del celular del exfuncionario José López para decir que «está más que clara la intervención directa» del hijo de la vice, Máximo Kirchner, de quien recordó que hasta diciembre de 2015 no había ocupado un cargo público, pero que estaba “al frente de la administración de las diversas empresas de su madre”.
Fernández está siendo procesado por el presunto delito de asociación ilícita y defraudación a la administración pública. El caso se refiere a presuntas irregularidades en la adjudicación de 51 contratos de obras públicas a empresas propiedad del empresario Lázaro Báez durante los gobiernos de los fallecidos Néstor Kirchner (2003-2007) y Cristina Fernández (2007-2015) en la sureña provincia de Santa Cruz.
Pruebas
El Ministerio Público «acreditó» que entre 2003 y 2015 operó en el interior del Estado «una asociación ilícita de características singulares» y forma «piramidal» que tenía «en su cúspide a las personas que ejercían la función de jefe de Estado», dijo Luciani al inicio de su alegato oral el pasado lunes por videoconferencia ante el Juzgado Oral en lo Penal Federal N° 2 de Buenos Aires.
El fiscal declaró que se ha demostrado que Néstor Kirchner y Cristina Fernández «han instalado y mantenido en el seno de la administración nacional y provincial de Santa Cruz una de las matrices de corrupción más extraordinarias» que se han desarrollado en el país.
Este viernes agregó que el argumento de la defensa de Fernández fue que todos los proyectos habían sido avalados por el presupuesto aprobado en el Congreso: “Está claro que no es así», retrucó Luciani.